El presente libro es una obra de investigación histórica elaborada por el Instituto Nacional de Cultura Filial Nueva Cajamarca, bajo la guía e inspiración de su Director, el Joven y destacado Profesor de Historia y Geografía, don Javier Avila Vitón, que junto a un grupo de colaboradores e intelectuales de nuestro medio, ha sorteado cada obstáculo como una gran lección, cada dificultad como un estímulo y cada lucha ha sido un despertar de cada día y así ha surgido esta obra para ser puesta al servicio del pueblo, donde los amantes de la lectura, de la presente y de las futuras generaciones, conocerán la historia de los pioneros y fundadores, el alma genuina de nuestro pueblo donde los hombres heroicos no se quedaron desgarrados en la hostilidad de los montes , sino que avanzaron en silencio y vencieron las inmensas dificultades y carencias que desafiaban a los aguerridos colonizadores.
Esta obra, nos ilustra la forma como en la colonización de la selva amazónica, San Martín viene a ser una región privilegiada y en especial el Alto Mayo por ser una zona productiva, por eso el visionario y Arquitecto Fernando Belaunde Terry decía. “La Selva es la gran despensa del Perú”. En el año 1965 se inicia este Plan regional de Colonización sustentándose en los estudios realizados por la FAO para el desarrollo de los pueblos de la selva y de esta manera se abrieron las primeras rutas migratorias para la ocupación de las tierras del Alto mayo, siendo la principal ruta de acceso la Aérea.
En esa época el aeropuerto de Rioja era el punto de enlace más importante, ya que por ahí ingresaron los primeros pobladores tomando vuelo y siguiendo la ruta Chachapoyas o Chiclayo-Rioja-Tambo Yuracyacu y el Alto Yuracyacu (hoy Nueva Cajamarca).La historia registra un hecho anecdótico que es importante resaltar. En los años 1965-1968, llegan los primeros inmigrantes hacia Yuracyacu, entonces algunos de los terratenientes de la época, como es el caso de la familia Mesias, tuvieron mucho temor de ser invadidos por los nuevos colonizadores o shishacos como solían llamar a los foráneos, razón por la cual mediante sendos memoriales pidieron que se reubicara el trazo de la carretera marginal que debería pasar por San Fernando y Yuracyacu, como ya es de conocimiento de todos, los trazos se replantaron con dirección al alto Yuracyacu, hacia el occidente dentro de montaña virgen, pensaron los terratenientes, que con ello iban a opacar o desanimar a un puñado de hombres valientes e indómitos, sin embargo estos llenos de fe, con la fortaleza de su espíritu agrario, vencieron todo obstáculo y avanzaron al Occidente en busca de los puntos de referencia que indicaban el nuevo trazo de la carretera.
La historia de Nueva Cajamarca es dividida en dos grandes Épocas: Primer Apogeo (1967-1990) y Segundo Apogeo (1994-2006) y una Época Intermedia relativamente corta: La Histeria Colectiva. Durante el Primer apogeo se implantan las primeras ferias dominicales, en el año de 1974 se crea la primera Agencia Municipal, en los años siguientes continúa un crecimiento progresivo de la población y un incremento de la actividad económica con una agricultura y ganadería floreciente, 10 años después alcanzaría la categoría de distrito, el 21-12-1984 según ley 24040, durante el segundo gobierno de Fernando Belaunde Terry.
Durante el periodo de los Gobiernos distritales surgirían las Rondas Campesinas y se produciría el crecimiento explosivo y desordenado de la población urbana, cuyo vehículo principal serían las invasiones, es así como se invaden tierras perimétricas al casco urbano que dan origen a nuevos sectores como: “Los Olivos”, “Cesar Vallejos”, “La Molina”, “Keiko Sofía” y “Perú 2000”.
Este crecimiento desordenado y no planificado ha sido el talón de Aquiles para varios alcaldes y para los líderes de la comunidad, hasta que en la presente gestión municipal del Q.F. James Carranza Rivera se ha elaborado los instrumentos legales, como la Zonificación Económica Ecológica, el Ordenamiento Territorial y el Plan de Desarrollo Urbano para orientar el desarrollo de Nueva Cajamarca.
Con el ejemplo valeroso de los pioneros y fundadores y con la visión estratégica de los líderes y los soñadores, nuestra comunidad será fortalecida como eje articulador y piedra angular de la integración de las Provincias del Alto Mayo (Rioja y Moyobamba) con la finalidad de crear la gran ciudad del Alto, amante de la naturaleza, donde personas, animales y plantas vivamos en armonía productiva, es el sueño y el reto de los líderes de Nueva Cajamarca para la futura integración del Alto mayo.
Por todo esto y mucho más, considero un privilegio hacer la presentación de este libro, que es una joya dentro de las investigaciones históricas realizadas en el Alto Mayo, en especial de lo nuestro, de Nueva Cajamarca, tierra de ensueños y esperanzas, cuna de fe y patriotismo, tierra de triunfadores.
Esta obra, nos ilustra la forma como en la colonización de la selva amazónica, San Martín viene a ser una región privilegiada y en especial el Alto Mayo por ser una zona productiva, por eso el visionario y Arquitecto Fernando Belaunde Terry decía. “La Selva es la gran despensa del Perú”. En el año 1965 se inicia este Plan regional de Colonización sustentándose en los estudios realizados por la FAO para el desarrollo de los pueblos de la selva y de esta manera se abrieron las primeras rutas migratorias para la ocupación de las tierras del Alto mayo, siendo la principal ruta de acceso la Aérea.
En esa época el aeropuerto de Rioja era el punto de enlace más importante, ya que por ahí ingresaron los primeros pobladores tomando vuelo y siguiendo la ruta Chachapoyas o Chiclayo-Rioja-Tambo Yuracyacu y el Alto Yuracyacu (hoy Nueva Cajamarca).La historia registra un hecho anecdótico que es importante resaltar. En los años 1965-1968, llegan los primeros inmigrantes hacia Yuracyacu, entonces algunos de los terratenientes de la época, como es el caso de la familia Mesias, tuvieron mucho temor de ser invadidos por los nuevos colonizadores o shishacos como solían llamar a los foráneos, razón por la cual mediante sendos memoriales pidieron que se reubicara el trazo de la carretera marginal que debería pasar por San Fernando y Yuracyacu, como ya es de conocimiento de todos, los trazos se replantaron con dirección al alto Yuracyacu, hacia el occidente dentro de montaña virgen, pensaron los terratenientes, que con ello iban a opacar o desanimar a un puñado de hombres valientes e indómitos, sin embargo estos llenos de fe, con la fortaleza de su espíritu agrario, vencieron todo obstáculo y avanzaron al Occidente en busca de los puntos de referencia que indicaban el nuevo trazo de la carretera.
La historia de Nueva Cajamarca es dividida en dos grandes Épocas: Primer Apogeo (1967-1990) y Segundo Apogeo (1994-2006) y una Época Intermedia relativamente corta: La Histeria Colectiva. Durante el Primer apogeo se implantan las primeras ferias dominicales, en el año de 1974 se crea la primera Agencia Municipal, en los años siguientes continúa un crecimiento progresivo de la población y un incremento de la actividad económica con una agricultura y ganadería floreciente, 10 años después alcanzaría la categoría de distrito, el 21-12-1984 según ley 24040, durante el segundo gobierno de Fernando Belaunde Terry.
Durante el periodo de los Gobiernos distritales surgirían las Rondas Campesinas y se produciría el crecimiento explosivo y desordenado de la población urbana, cuyo vehículo principal serían las invasiones, es así como se invaden tierras perimétricas al casco urbano que dan origen a nuevos sectores como: “Los Olivos”, “Cesar Vallejos”, “La Molina”, “Keiko Sofía” y “Perú 2000”.
Este crecimiento desordenado y no planificado ha sido el talón de Aquiles para varios alcaldes y para los líderes de la comunidad, hasta que en la presente gestión municipal del Q.F. James Carranza Rivera se ha elaborado los instrumentos legales, como la Zonificación Económica Ecológica, el Ordenamiento Territorial y el Plan de Desarrollo Urbano para orientar el desarrollo de Nueva Cajamarca.
Con el ejemplo valeroso de los pioneros y fundadores y con la visión estratégica de los líderes y los soñadores, nuestra comunidad será fortalecida como eje articulador y piedra angular de la integración de las Provincias del Alto Mayo (Rioja y Moyobamba) con la finalidad de crear la gran ciudad del Alto, amante de la naturaleza, donde personas, animales y plantas vivamos en armonía productiva, es el sueño y el reto de los líderes de Nueva Cajamarca para la futura integración del Alto mayo.
Por todo esto y mucho más, considero un privilegio hacer la presentación de este libro, que es una joya dentro de las investigaciones históricas realizadas en el Alto Mayo, en especial de lo nuestro, de Nueva Cajamarca, tierra de ensueños y esperanzas, cuna de fe y patriotismo, tierra de triunfadores.
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